El anterior artículo que escribí, y que está en el Blog de ERART:
hace referencia a la democracia y sugiere tener personas preparadas para la gestión de Estado. Ante la realidad que estamos viviendo a nivel mundial, con una pandemia a cuestas y con visos de no terminar pronto, me pongo a pensar y veo esta situación como una OPORTUNIDAD.
Sí, es el momento de hacer un giro en el modus vivendi, que ya está en proceso de cambio en nuestra forma de pensar. La izquierda, la derecha, el centro, etc., las ideologías han sido transversales a un común denominador, la corrupción y todo lo que la conlleva.
En nuestro país queda demostrado que no hay un interés real por gestionar los recursos para la mejora de las condiciones de vida. También se ha generado alrededor del entorno ideológico un sentimiento de odio y de competencia insanos, que contribuye a la división, no hay progreso si se mantienen las brechas y no hay desarrollo si las oportunidades no llegan a todos, respetando nuestra multiculturalidad. Estamos viviendo una crisis absoluta, un peligroso ambiente, caldo de cultivo que puede generar acciones violentas e incrementar aún más las diferencias, sin encontrar una salida.
Es tiempo de generar el cambio, primero en NOSOTROS MISMOS, desde nuestras acciones personales para llegar luego al Estado. Debe haber un mínimo de capacidad de autocrítica, de reflexión, de pensar, de actuar, de decir, de sentir. Para poder vivir en concordancia con uno mismo, con nuestro entorno, partiendo de la familia y llegando a la sociedad. Pienso debemos ir al encuentro del ser humano, vivir con valores, ponernos en contacto con la naturaleza y con el Creador. Reencontrarnos con nuestra esencia y ponernos en línea con el universo. Siempre estaremos a tiempo de cambiar, cambiar la historia funesta de siempre y evolucionar. La OPORTUNIDAD está en NOSOTROS. Fotografía: @tamarasaith
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